Educación en tiempos del COVID.19

Educación en tiempos del COVID.19

Por: Erik Cabezas



Hace unos días el gobierno nacional decreto emergencia nacional debido al brote pandémico del virus conocido como COVID 19 o coronavirus, por lo que toda nuestra nación por no decir el mundo tuvo que replegarse a sus hogares en busca de escudo y refugio del mortal virus.

En medio de la difícil situación los profesores y estudiantes tuvimos que rápidamente adaptarnos a la nueva normalidad, la educación de nuestros hijos no puede parar dijeron los ministros, asi que rápidamente todos los profesores sacamos nuestras herramientas pedagógicas mas poderosas para hacer frente a la pandemia y apoyar la educación de los niños dese casa.

A pesar de la incomodidad que una cuarentena obligatoria puede generar en las vidas de las personas y las familias, increíblemente la peor situación ha sacado lo mejor de muchos, y es evidente que nuestra comunidad lincolniana ha mostrado que nuestros valores no son solo un producto conceptual consignado en un documento, sino que hacen parte viva de nuestra comunidad y viven en el corazón de las familias que hacemos parte de este hermoso proyecto.

En medio de la pandemia, he podido ver padres orgullosos de sus hijos, niños compartiendo con sus padres el proceso educativo, y he sentido el apoyo, y la solidaridad de los padres hacia los docentes y viceversa, a esto solo se le puede llamar “UNIDAD”.

Ver a los niños aprendiendo música en estos: “los tiempos del coronavirus”, me ha hecho recuperar la fe y la esperanza, el leer los correos y ver los videos de muchos de ustedes realizando las actividades de clase, y haciendo de la música parte de sus vidas cotidianas, me ha hecho pensar en que todavía tenemos un gran valor, en un mundo en el que muchos hablamos del hombre como un virus para el planeta, aun valemos la pena, como seres humanos, como hermanos, como estudiantes, como padres, como profesores, como amigos, como colombianos.

Si de algo estoy seguro, es que, aunque nos separan kilómetros de distancia y paredes, tapabocas y decretos. Lo que nos une es aun mas grande, mas glorioso y mas sobrenatural. El sentimiento de ser uno no se lo puede llevar un virus, nuestra unidad como humanidad va mas allá de nuestro entendimiento y nace desde los cimientos de la tierra y desde el origen del hombre.

Solo algo puedo decir, y solo lo he podido entender gracias al coronavirus, todo esto me ha enseñado a creer que todo puede ser mejor, porque en momentos de dificultad siempre sale lo mejor de nosotros, también he aprendido que el Lincoln no es solo mi trabajo es mi familia, he aprendido, que se puede ser papa de 400 niños, pero que también se puede tener 400 profesores, que cada día me enseñan, aun desde la distancia que todo puede ser mejor, si se tiene la fe y la inocencia de un niño, si podemos ver las cosas como las ven los niños. Hoy estoy mas que seguro que el mal que pasea por las calles, no puede tocarnos, porque la bondad y el amor esta dentro de las casas, en el seno de la familia…La familia lincolniana.

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